lunes, 10 de marzo de 2014

Confesiones II

Hacía mucho tiempo que no hablaba con él pero por casualidades que nunca llegaré a comprender hoy decidí hacerlo. Ha sido una conversación en la que ninguno de los dos sabía que decir, una conversación que me ha hecho recordar cosas que pensé que ya tenía olvidadas. La verdad es que ahora me doy cuenta de que él siempre será una espinita clavada y es que en el fondo todas las personas tenemos una, aunque no queramos admitirlo por miedo a críticas. Yo lo acabo de admitir, aunque tal vez sea porque aquí nadie me conoce y nadie me va a juzgar. Realmente mi problema no es que no le haya olvidado sino que todavía no he superado ese no que me dio por respuesta, esas esperanzas y sobre todo, no haberme dado cuenta de la realidad porque estaba tan en mi mundo que mi realidad era mi ilusión. Apesar de todo lo que me ha pasado después de eso y que las cosas han cambiado, y mucho, todavía sigo con el deseo de ser algo más que amigos.
PD: me gusta vivir de ilusiones y de sueños rotos aunque actualmente mi vida fue un anterior sueño que todavía no soy capaz de creérmelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario